Por Enrique Martínez
Tras pedir apoyo federal, el gobierno de Nuevo León proyecta concesionar la construcción y operación de un nuevo penal o realizar un esquema mixto de asociación con el sector privado.
Manuel González, secretario general de Gobierno confirmó que el problema real es que el Topo Chico no está en condición de seguir operando.
Adelantó que en los próximos días el gobierno deberá definir cómo construir el nuevo penal que se requiere, y reveló que analizan la posibilidad de concesionar construcción y operación del nuevo centro penitenciario, o hacer un esquema mixto de asociación con una empresa privada.
El funcionario estatal expuso que la Federación solamente tiene apoyos de diversos programas como capacitación, pero exigió apoyo económico para la construcción del nuevo penal en Nuevo León, pospuesto desde el 2012 por falta de recursos.
Asistió González Flores a una entrega de certificados en capacitación en derechos humanos a personal que labora en los penales, y al comentar la propuesta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos sobre la necesidad de cerrar el penal del Topo Chico, reiteró el llamado al gobierno federal para que apoye.
“Vamos y buscamos a la Federación el apoyo, y no hay más que programas como éste, para promover los derechos humanos. Los reconocimientos son bien merecidos y son bienvenidos, pero esta es la realidad que tenemos que exponer, algo tenemos que hacer y rápido para enfrentar esto porque se vive una tensión permanente”.
