Por Salomé Martínz
El Gobierno Municipal de Apodaca ha dado un paso significativo en la atención a los migrantes con la inauguración del Centro Integral de Atención de Migrantes (CIMA), un proyecto que busca ofrecer servicios esenciales a mujeres embarazadas, niños y migrantes en general, como atención médica y educación, oportunidades de empleo y asesoría en trámites legales.
CIMA, siendo la primera oficina de este tipo a nivel nacional, ha sido inaugurada con el firme propósito de abordar la problemática que enfrentan los migrantes en su tránsito y estancia en el país. El alcalde de Apodaca, César Garza Villarreal, ha instado a los tres niveles de gobierno, municipal, estatal y federal, a unirse a esta iniciativa para establecer Centros de Atención similares en todos los municipios de Nuevo León.
Garza Villarreal destacó la complejidad del fenómeno migratorio, que involucra aspectos políticos, económicos y, sobre todo, derechos humanos. El municipio, siendo una ciudad industrial con una creciente demanda de mano de obra, puede ser un destino beneficioso para los migrantes, siempre y cuando se les brinden oportunidades de empleo de manera legal y se respeten sus derechos.
El munícipe enfatizó que, si bien los municipios no tienen la facultad constitucional para determinar la condición migratoria de las personas, tienen la responsabilidad de defender sus derechos humanos. Destacó la importancia de trabajar en conjunto con organizaciones no gubernamentales como Libre Mariposa y Esperanza, que han contribuido a la apertura de este centro de atención.
Con la creación de CIMA, se busca que cualquier migrante, sin importar su nacionalidad, que llegue a Apodaca se sienta bienvenido, protegido y atendido. Garza Villarreal expresó su deseo de que los migrantes que lleguen a la ciudad puedan acudir a una oficina que no los evaluará ni calificará, sino que los abrazará en su condición más esencial.
Durante la inauguración de CIMA, estuvieron presentes la presidenta estatal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Susana Méndez Arellano, el padre Felipe de Jesús Sánchez, director de Casa INDI, y representantes del Instituto Nacional de Migración y diversas oficinas consulares, respaldando esta importante iniciativa para mejorar la vida de los migrantes en Apodaca.
