Por pmnoticias.tv
Luego de más de un año de pandemia y distanciamiento social, los jóvenes de las cuatro unidades de Preparatoria de la Universidad de Monterrey tuvieron la oportunidad de acudir a las instalaciones del campus para recoger los documentos que los acreditan como bachilleres, además de un kit con el que vivieron el festejo virtual en compañía de familia, compañeros y directivos.
El primer momento de la graduación se llevó a cabo entre el 5 y 12 de junio, en donde a manera de drive thru llegaron al campus acompañados de dos personas para en una breve ceremonia recibir la constancia que los acredita como egresados de Prepa UDEM. Posteriormente, el 16 de junio los alumnos de la Unidad Valle Alto, la Unidad Fundadores y la Unidad Obispado presenciaron su ceremonia virtual. El 17 de junio tocó el turno para los egresados de la Unidad San Pedro.
“El contexto actual es muy volátil, nos exige sabiduría y estar conscientes de que debemos transformarnos. Algunos tienen muy claro qué carrera eligieron, otros pueden tener algunas dudas o inquietudes todavía. Pero la clave está en escoger una carrera que los haga sentir felices, que los motive y que vaya de acuerdo a lo que quieren hacer en el futuro.
“En lo personal, creo que todos encontramos un mayor sentimiento de satisfacción cuando nos dedicamos al servicio. Es decir, cuando el ejercicio de nuestra carrera nos permite poner todos nuestros talentos, experiencias y creatividad para el bien de los demás. Esto nos ayuda a crecer como personas e impulsa enormemente el desarrollo de nuestras comunidades”, mencionó Mario Páez González, rector de la Universidad de Monterrey.
En tanto, los profesores mediante un video le desearon a sus exalumnos éxito en su carrera profesional, les recordaron que como la Prepa UDEM les dejó huella, ellos -como estudiantes- también hicieron un impacto importante en sus maestros, les pidieron seguir viviendo en el servicio a los demás y les aseguraron que cuentan con los conocimientos y herramientas necesarios para alcanzar sus sueños y crear su mejor versión.
Posteriormente, varios graduados representantes de las preparatorias tuvieron la oportunidad de compartir con sus compañeros sus sentimientos y reflexiones de terminar una etapa tan emocionante y formativa como lo es el bachillerato.
“El día de hoy estamos terminando de escribir un capítulo de nuestras vidas, sin duda revolucionario. Un capítulo que escribimos con anhelo y esperanza. Un capítulo que creíamos conocer y terminó por enseñarnos nuestra capacidad de escribir nuevas historias”, compartió Ana Regina Torres Garza, egresada de la Unidad Valle Alto.
Para Ricardo Garza Benitez, de la Unidad Obispado, terminar la preparatoria es algo agridulce, pero compartió con sus compañeros que lo importante es saber que la graduación significa una meta alcanzada y la bienvenida a nuevas aventuras.
“Vivimos una etapa la cual muchas veces pareció un pesado bloque sobre nuestros hombros, lleno de angustia, desesperación, esfuerzo, largas noches y lágrimas, que hoy parece ser arena entre nuestras manos, una etapa que se esfuma, pero que siempre nos mantendrá atados con una gruesa cuerda de recuerdos que ni un caos mundial podrá cortar”, expresó.
Nancy Abigail Garza Flores, de la Unidad Fundadores, acogió las vivencias de su vida de bachillerato desde el Día Troya como “tomar esa antorcha y decir con todo el corazón ‘soy troyano’ no pensamos que eso simbolizaría el inicio de una nueva familia y que dejaríamos huella en aquel lugar que se convirtió en nuestro segundo hogar”.
Y Carlos Emiliano Arias Guadiana, representante de la Unidad San Pedro, está listo para “comerse el mundo”, pues se siente preparado y bien acompañado para hacerlo.
“Estos tres años vividos en la prepa UDEM nos prepararon para conquistarlo. Hubo obstáculos, unos más difíciles que otros, hasta una pandemia intentó pararnos, pero ninguno pudo con nosotros, porque hoy, hoy estamos aquí. Este es un día para celebrar, celebrar que tanto el futuro que nos espera como los pasados tres años vividos no hubieran sido posible si no hubiéramos escogido ser parte de esta gran comunidad: la prepa UDEM”, aseguró.
Luego de que los mil 58 estudiantes de la Preparatoria UDEM recibieron su diploma, se dio paso al Rito Troyano, una tradición en la que el director de cada unidad guía a sus alumnos en el camino de la trascendencia. El fuego del pebetero, encendido por los alumnos previo a su primer día de preparatoria, ahora será la luz que iluminará su vida universitaria. Así, representantes de cada salón de la generación tomaron una antorcha con el fuego del pebetero en señal de compromiso con la excelencia y los valores de la UDEM
La celebración concluyó con María del Roble Garza Treviño, vicerrectora de Educación Media Superior, quien tuvo la responsabilidad de nombrar al Mejor Bachiller, el máximo honor concedido por la UDEM a un estudiante de preparatoria, jóvenes que sobresalieron por su dedicación al estudio y por obtener el máximo aprovechamiento académico, logrando el más alto promedio de cada uno de los programas de la Prepa UDEM.
En esta ocasión la distinción, representada con una medalla, fue para Daniela Sánchez Mena de la Unidad Obispado; Óscar Torres Mejía, Sofía Lelo de Larrea Gil y Sofía Chapa Alonso de la Unidad San Pedro; Alejandro Córdoba Inzunza, Alan Becerra de la O, Jacqueline García Galindo y Angélica Treviño Villanueva de la Unidad Fundadores; y María Palacios Flores, Blanca Garza Garza y Raquel Díaz Granados de la Unidad Valle Alto.
“Vivieron más de un año presencial que, estoy segura, llenó a tope su corazón. Y de pronto vino una etapa que hoy, vista hacia atrás, nos hace darnos cuenta de que fue una oportunidad de crecer de formas que nunca hubiéramos imaginado. Y entonces ustedes, sus familias, sus maestros, se atrevieron a ser distintos, a mostrarle al mundo que los sueños, la perseverancia y la fuerza de voluntad son las herramientas más poderosas para seguir adelante”, mencionó.
De los mil 58 graduados, 135 pertenecen al Bachillerato Bilingüe, 279 al Bachillerato Bicultural, 153 al Bachillerato Internacional y 491 al Bachillerato Multicultural.
Mientras que de los 290 jóvenes que recibieron una distinción especial para cinco fue la de Formación Integral, para 214 fue la Mención Honorífica, para 66 la Mención Honorífica de Excelencia, tres obtuvieron la combinación de Mención Honorífica y Formación Integral y dos la combinación de Mención Honorífica de Excelencia y Formación Integral.