Por Salomé Martínez
Enclavado en el corazón del desierto coahuilense, el municipio de Cuatrociénegas de Carranza se halla presto para ampliar la recepción de turistas nacionales y extranjeros sin perder su esencia y tradiciones de pueblo mágico.
Con la apertura frecuente de más hoteles boutique y restaurantes, y una infraestructura turística que permitió recibir en el 2019 a 200 mil visitantes, esta localidad de apenas 11 mil habitantes, cuenta con todas las facilidades y reglas sanitarias para retomar su lugar como punto de turismo obligatorio.
En su segundo año de gestión la munícipe impulsa la apertura de nuevos hoteles denominados boutique, con conceptos apropiados para maximizar la estadía del turista, y permitir sobre todo, el conservar la infraestructura arquitectónica del casco municipal.
“Tenemos que cumplir con los protocolos de salud de cada uno de los hoteles, cada uno de los parques y restaurantes, y que la gente tenga la certeza de que venir a Cuatrociénegas es seguro para salud, manteniendo la sana distancia y evitando aglomeraciones o tumultos”, agregó.
Cantú Moncada destacó que la Naturaleza también contribuye a evitar potenciar la transmisión del Covid-19, al tener los parques naturales y las áreas de fosas abiertas, con grandes extensiones de terreno para que los turistas puedan disfrutar al máximo con un mínimo riesgo de salud.
Las sinergias entre las autoridades federales, estatales y municipales con la iniciativa privada y los inversionistas, contribuyen al buen desarrollo de proyectos y programas de promoción turística, apertura de nuevos espacios y negocios y la generación de empleos, afirmó.
Aunque el número de turistas ha disminuido considerablemente este 2020 debido a la pandemia del Coronavirus, la alcaldesa señala que en los últimos tres meses “cada fin de semana nos faltan habitaciones y hay un mayor flujo de visitas a los parques, lo cual nos da un aliciente de que en los próximos meses se recupera el nivel que teníamos”.
El flujo turístico será controlado, advirtió Cantú Moncada, para evitar un desorden y riesgos de salud, pero sobre todo, preservar la tranquilidad de los ciudadanos.
El nombre formal de la ciudad es Cuatrociénegas de Carranza, en honor de Venustiano Carranza, primero gobernador de Coahuila y después presidente de México de 1915 a 1920, quien, nació ahí en 1859.
Fue en noviembre de 1994 que el Gobierno Federal decretó que el valle de Cuatrociénegas se protegería como Área de protección de flora y fauna, siendo famosa por los manantiales y lagunas que la rodean y que florecen en medio del desierto, y que constituyen una reserva de la biosfera y forman un ecosistema único con especies endémicas.
Entre sus principales atractivos destacan la Parroquia de San José, la Presidencia municipal y su casco histórico, la Casa de la Cultura Aridoamericana, la Casa Museo Venustiano Carranza, así como las bodegas vinícolas Ferriñoy Vitali.