Por: Fanny Martínez
El impacto del papel de la mujer en la calidad de los consejos corporativos y los comportamientos de riesgo en empresas familiares fueron algunas de las inquietudes plasmadas en las investigaciones finalistas de la décimo primera edición del Premio UDEM Adalberto Viesca Sada a la Investigación en Empresa Familiar Latinoamericana.
Los tres primeros lugares de la distinción otorgada por la Universidad de Monterrey, a través de su Centro de Empresas Familiares, fueron obtenidos por equipos de académicos interuniversitarios de Reino Unido, España, Chile, Perú y Argentina.
El primer lugar correspondió a la investigación Apalancamiento en las empresas familiares: el papel moderador de las directoras femeninas y la calidad del consejo, realizado por Jannine Poletti-Hughes, de la University of Liverpool Management School, y Beatriz Martínez García, de la Universidad Pública de Navarra.
El segundo lugar fue para el tema Comportamiento de riesgo en empresas familiares cotizadas en Chile: un enfoque de riqueza socioemocional, a cargo de Orlando Llanos-Contreras y José Tomás Arias Moya, de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, en Chile, y de Carlos Maquieira, de la Universidad del Pacífico, Escuela de Posgrado, en Lima, Perú.
El tercer lugar fue otorgado al trabajo Gobierno corporativo en las firmas familiares más grandes de América Latina, elaborado por Pedro Vázquez y Alejandro Carrera, de la IAE School of Bussines de la Universidad Austral, y de Magdalena Cornejo, de la Escuela de Gobierno de la Universidad Torcuato di Tella, en Argentina.
La ceremonia de entrega, realizada la noche de este jueves, en las salas 7 a la 9 de Educación Continua, en el edificio Estoa, fue encabezada por el rector Mario Páez González y Gabriel Zambrano Benítez, presidente del Consejo del Centro de Empresas Familiares de la UDEM.
Zambrano Benítez señaló que la obtención y la aplicación de este tipo de conocimientos es un tema que adquiere gran relevancia, ya que con el estudio de la empresa familiar se favorece la identificación de prácticas efectivas para la continuidad y el crecimiento de esas organizaciones.
“Esto hace posible no solo un exitoso cambio generacional, sino además una fuente de generación de empleo y el bienestar de toda la sociedad”, sostuvo.
Agregó que cada una de las investigaciones del Premio Adalberto Viesca Sada establece resultados trascendentes para el desarrollo de las empresas familiares.
“Considero que su experiencia será enriquecedora; estamos seguros que el conocimiento reflejado en sus trabajos impulsará el fortalecimiento de las empresas familiares y la formación de empresarios exitosos”, indicó.
Al evento, asistieron la familia Viesca Treviño: Lucía María Treviño Villarreal, directora de Servicios Escolares de la UDEM; y sus hijos Adrián, Gabriel y Alejandro Viesca Treviño; además de integrantes de los Consejos de la UDEM y del Centro de Empresas Familiares; así como directivos universitarios y participantes del certamen.
Asimismo, se contó con la presencia de Jesús Herrera y Carlos de la Garza Santos, quien recibió un reconocimiento por parte de la UDEM por su trayectoria de 15 años que permaneció como miembro activo del Consejo del Centro de Empresas Familiares.
En la ceremonia, también participaron Carlos Basurto Meza, vicerrector de Educación Superior; y Carlos Atoche Kong, director de la Escuela de Negocios de esta casa de estudios.
Después de la premiación, Ram Subramanian, profesor de Liderazgo en la Escuela de Administración de Empresas de Stetson University, en Florida, Estados Unidos, impartió la conferencia Usando casos de estudio en empresas familiares: ventajas, dificultades y oportunidades.
En su charla, Subramanian estableció que enseñar a través de casos es importante porque pone a los alumnos en el rol del tomador de decisiones, tienen que hacer el análisis y hacer una recomendación; Harvard University llama a esto un aprendizaje centrado en el participante.
El académico estadounidense señaló que, actualmente, el método de enseñanza a través de casos es ampliamente utilizado, aunque, desafortunadamente, algunas veces no se utiliza de forma correcta.
Para Subramanian, hay una forma no eficaz de aplicar esta metodología, que es exponer el caso a través del maestro o maestra y preguntar al estudiante su opinión, en donde solo unos participan, ya sea voluntariamente o al pedir su participación.
“En mi opinión, de acuerdo a mi experiencia, esta forma no es tan eficaz, porque la ventaja del método es que pone al estudiante en el centro del aprendizaje; si solamente cuatro alumnos presentan el caso y el resto de la clase no está tan activamente involucrada, o solamente el maestro habla durante 90 minutos, no es precisamente un aprendizaje centrado en el participante”, expuso.
“Pero esa no es la única forma en que se utilizan los casos: hay profesores o escuelas de negocios que prefieren trabajar por equipos para que los propios estudiantes presenten los casos; tiene que ser una discusión interactiva, involucrando a todo el grupo”, sostuvo.
Al final, se realizó un panel, moderado por José Ángel Vázquez Villalpando, director del Centro de Empresas Familiares de la UDEM; en el que participó Claudio Muller, de la Escuela de Economía y Negocios de la Universidad de Chile; Jannine Poletti-Hughes, de la University of Liverpool Management School; y Juan Manuel San Martín, director general de Vinculación y Desarrollo de la Universidad de las Américas, en Puebla.