Por Fanny Martínez
El rector Antonio J. Dieck Assad previno a los 563 nuevos profesionales para “no dejarse seducir por la ilegalidad” y los invitó a actuar de forma íntegra y a continuar sumando aprendizajes, en la ceremonia de graduación Primavera 2016 para profesional y posgrado.
Esta generación, integrada por 522 egresados de nivel profesional y 41 de posgrado, fueron llamados a comprometerse sin temer al sacrificio, aprender del fracaso y construir buenas relaciones, en un acto celebrado ayer en el domo instalado sobre la explanada de Rectoría del campus UDEM.
En los momentos culminantes de cada una de las dos ceremonias que se desarrollaron durante el día, esta casa de estudios designó a quienes se hicieron merecedores al grado de Summa Cum Laude, el máximo reconocimiento que otorga a sus alumnos, por sobresalir tanto en lo académico como en su formación en liderazgo y compromiso social.
Las graduandas reconocidas fueron Adriana Rocío Flores Guzmán, de Licenciado en Derecho; Ana Karina Kalife Barrera, de Licenciado en Nutrición; Regina Isabel Cortés Garza, de Arquitecto; Ana María Barrera Portillo, deLicenciado en Finanzas Internacionales; María Fernanda García Padilla, de Licenciado en Mercadotecnia Internacional; y Janela Aída Salazar Berazaluce, del programa académico de Licenciado en Ciencias de la Información y Comunicación
También por su destacado desempeño académico, la UDEM entregó el reconocimiento de Cum Laude a 42 alumnos de profesional y 9 de maestría, en tanto que la distinción de Magna Cum Laude, que reconoce además una notable participación en actividades formativas, fue entregada a 9 graduandos.
El acto estuvo encabezado por Álvaro Fernández Garza, miembro del Consejo, en representación de Victor Zorrilla Vargas, presidente del organismo universitario; el rector Antonio J. Dieck Assad; los cuatro vicerrectores y Carlos de la Garza Santos como orador huésped.
Además, estuvieron presentes en la ceremonia académica miembros del Consejo General; directivos, profesores y padres de familia.
En su mensaje, el rector Dieck Assad dijo que lo mejor de la experiencia universitaria es que permite que el proceso educativo sea amplio, se dé en una variedad de escenarios y de manera transversal.
“Se trata de aprender, pero de aprender a hacer un esfuerzo; de resolver con cada recurso que tuvieron a la mano y de concluir una etapa de estudios formales para iniciar otra de constante aprendizaje en la práctica o con mayor profundidad académica”, señaló.
El directivo universitario recordó a los alumnos que los aprendizajes y experiencias los han encontrado en formas muy diversas y que son algo que van a mantener por el resto de sus vidas.
“Los aprendizajes son un activo que ya es parte de ustedes, que nadie se los puede quitar y que tienen que seguir cultivando, para aplicar su sabiduría en todo lo que hagan de ahora en adelante”, expuso.
Dieck Assad exhortó a los alumnos a realizar cinco acciones: atreverse a asumir riesgos y a confiar en ellos mismos, comprometerse sin temer al sacrificio, actuar con integridad, aprender del fracaso y construir buenas relaciones.
“No necesitan de la oscuridad para trabajar; no se dejen seducir por la promesa de avanzar cometiendo actos de ilegalidad; los acuerdos debajo de la mesa nunca son tan redituables como aparentan, hacen mucho daño y dejan una huella imborrable en su ser”, externó.
Por su parte, Carlos de la Garza Santos, socio del Despacho Santos-Elizondo y egresado de la primera generación de Licenciado en Derecho de la UDEM, afirmó que se requiere de la pasión y del talento para tener éxito.
El también consejero del Centro de Empresas Familiares de la UDEM recordó que el ser humano es un ser interdependiente, lo que significa que todos necesitan de todos, por lo que se requiere de la empatía y de trasmitir “buena vibra”.
“Tendamos, como dice el papa Francisco, siempre puentes y no muros, puentes con la familia, con la pareja, con los clientes; en ese tender puentes, habrá seguramente algún desgaste; desgastémonos para construir, pues para destruir también se desgasta uno”, sostuvo.
De la Garza Santos llamó a los jóvenes a distinguirse como hombres y mujeres de bien, a conducirse con respeto, honestidad, humildad, responsabilidad y apego a la legalidad, sin egoísmos y sirviendo en lo que cada uno de ellos pueda a la comunidad.
Los programas académicos que tuvieron mayor número de egresados fueron los de Médico Cirujano y Partero, Arquitecto, Licenciado en Derecho, Licenciado en Diseño Gráfico, Licenciado en Mercadotecnia Internacional, Licenciado en Administración de Empresas, Ingeniero Industrial y de Sistemas, Licenciado en Comercio Internacional y Licenciado en Ciencias de la Información y Comunicación.
Previo a la entrega de constancias académicas, se realizó una misa de agradecimiento en cada turno, oficiadas por José Bayardo Pérez Arce, misionero del Espíritu Santo, por la mañana; y por Francisco Gómez Hinojosa, vicario general de la Arquidiócesis de Monterrey, por la tarde.
Al término de la ceremonia de graduación, los jóvenes tomaron protesta como nuevos profesionales y los reconocidos con el Summa Cum Laude realizaron el tradicional toque de la campana que lleva el nombre de ese grado, en representación de toda la generación.
