Por Fanny Martínez
Agustín Basave Benítez señaló hoy ante alumnos de la UDEM que la norma en México está demasiado alejada de la realidad y que la corrupción y la desigualdad son dos cánceres arraigados desde hace cinco siglos.
“(La corrupción y la desigualdad) los dos tumores cancerosos de México nos vienen de la historia colonial del país. Se alimentan mutuamente y si me valen la metáfora, el tumor de la corrupción está alojado en el cerebro de la nación y el de la desigualdad en el estómago. Ambos están en plena metástasis.
“Pero llevamos con ellos cinco siglos, porque el origen de la corrupción en México, a mi juicio, está en una norma demasiado alejada de la realidad”, explicó el actual presidente del comité ejecutivo nacional del Partido de la Revolución Democrática ante la joven audiencia reunida en la Sala del Claustro Universitario.
Desde entonces, señaló, la frase “acátese, pero no se cumpla” se volvió sacramental y sigue vigente.
“La ley en México no está hecha para cumplirse, para guiar, como debe ser. Por ejemplo, una constitución debe ser la guía cotidiana del comportamiento individual y social de una comunidad, se debe aplicar todos los días y aquí no, aquí está hecha como un proyecto de nación, algo a lo que aspiramos”, mencionó.
Basave Benítez impartió esta tarde la charla “Corrupción y desigualdad: el cáncer de México y sus dos tumores”; previo a esta conferencia, el doctor Antonio J. Dieck Assad lo recibió para ser anfitrión en esta casa de estudios.
Esta actividad fue organizada por la UDEM a través de la División de Derecho y Ciencias Sociales y de la dirección de los programas académicos de Ciencia Política y Gobernanza (LPG) y de Derecho (LDE).
Un vicio de antaño
Cuando el ciudadano osa desafiar los códigos de reglas no escritas que se crean para llenar ese vacío entre la norma y la realidad, añadió, se aplica la ley.
“Ese vicio que nos creó la metrópoli de aquella época lo hemos sublimado y lo hemos hecho todavía más grande, es lo que yo llamo el esteticismo legislativo, es decir, se norma para hacer leyes muy bonitas, aunque no se puedan cumplir o sean muy difícil aplicarlas”, expuso.
La gente se ha acostumbrado a evadir la ley, la cual no determina la conducta de los ciudadanos, afirmó.
El ex embajador de México en Irlanda y diputado con licencia, además de profesor e investigador con licencia de la Universidad Iberoamericana estuvo también en la ciudad para presentar su libro “Mexicanidad y Esquizofrenia”.